El Dios del Destino de la Tierra perdió una apuesta contra el Dios Principal de Galdardia y eligió diez almas para entregar nuevos recipientes. Entre esas almas estaba Luciel, un asalariado, que luchó contra su destino de muerte.

Anne Halford es una artesana de dulces decidida a seguir los pasos de su madre y convertirse en Maestra del Azúcar Plateado, un título que sólo concede la realeza. Para realizar su sueño, contrata a Challe, un hado apuesto como protección.

En una grandiosa mansión, una joven y alegre muñeca viviente comienza a servir a su ama en la sombra, sólo para descubrir a través de su vinculación que las cosas no son lo que parecen.